La guerra y la posguerra ; Épocas de desolación, donde todo vale por
vencer, cuando incluso las pobres leyes se invalidan abiertamente para caer en
“estados de excepción”, para impunemente hacer uso de todos los medios
necesarios para que cualquier de los bandos
inmiscuidos salga avante. Es en estas situaciones de conflictos donde “el
demonio” se desata, donde las peores pasiones e instintos más salvajes de los
seres humanos, salen a flote, la misma potestad delos soldados con licencia
para matar más las numerosas vidas perdidas en daños colaterales y en si el
desorden imperante provoca a su vez también que muchos monstruos humanos se
aprovechen para hacer lo que mejor les va en su existencia: Matar.
Es esta ocasión nos centraremos en los conflictos armados más grandes
que hubieron en el siglo pasado, la primera y la segunda guerras mundiales. Y
son precisamente europeos (lugar donde se desarrollaron dichos conflictos con
mayor fiereza) Alemania y Francia y su
penosa posguerra en los casos teutones. En Alemania fueron dos sujetos
quienes durante la postguerra inmediata
acabaron con la vida de inocentes solo por el gusto de hacerlo, ellos
fueron Fritz Haartman y Peter Kurten. Por otro lado y en la segunda
gran guerra tenemos al infame Doctor Muerte:
Marceli Petiot. Kurten quien paso a la posteridad con el apodo del “Vampiro de Dusseldorf” por
haber cometido sus crímenes en las cercanías de esa ciudad germana; Nació en 1883 en Mullheim , parte cercana a
la frontera belga y dentro de la influencia de
la ciudad de mayor tamaño más cercana: Colonia.
Vivió el conflicto armado en todo su esplendor aunque no sirvió en
línea por ser considera subnormal, eso si, su psicopatía viene de temprana
edad, cuando a los 9 años ahogo en un río a dos amigos suyos, si fue a raíz de
experimentar la conflagración armada que termino por perder completamente la
chaveta y empezó a matar de manera sistemática a mujeres jóvenes que en una
Alemania que padecía los horrores de la posguerra caían en sus garras por
hambre, el no discriminaba edad y siempre atacaba sexualmente a sus víctimas,
era un sádico que gozaba degollando a las pobres chicas y cuando después de una
crisis colectiva fue detenido y ser condenado a la horca, pregunto al verdugo
textualmente: Dígame ¿ cuándo me hayan decapitado ¿podré oír siquiera un
momento el ruido de mi propia sangre saliendo del cuello?". Su caso inspiro la película de” M el vampiro
de Dusseldorf “de Fritz Lang una de las primeras películas que hablaban de
asesinos seriales en la historia del cine.
Haartmann, otro “vampiro” pero este de Hannover fue un psicópata
homosexual contemporáneo de Kurten, solo que este tenia especial predilección
por el canibalismo, nacido en 1879, siempre ataco adolescente que captaba a la
salida de la estación de trenes de dicha ciudad, atraía a los jóvenes hambrientos
por la posguerra y las condiciones tan complicadas de embargos que afectaron la
Alemania derrotada y con promesas de trabajo o comida lo llevaba a su piso
donde los violaba, torturaba y finalmente destazaba para comer e incluso hacer
finos embutidos con los restos para repartir entre sus vecinos y gente del
barrio, para esto contaba con la ayuda de su complice y amante Hans Grans, al
igual que Kurten fue decapitado cuando fue descubierto. Ambos Kurten y Haartma
alegaron tener traumas de guerra por todo el horror que vivieron durante la
prima guerra que los pillo siendo ya adultos de mediana edad aunque esto no les
sirvió de atenuante.
Por último tenemos al tristemente célebre Doctor Marcel Petiot que
durante la segunda guerra mundial bajo
el pretexto de ayudar a escapar del Paris ocupado por los nazis, mato a más de
27 judíos adinerados y los coció en un horno para quedarse con sus bienes,
quiso hacer pasar sus actos como dignos ya que argumentaba que eran nazis todos
los asesinados al ser descubierto fue guillotinado y sus últimas palabras
fueron "Caballeros, les ruego que
no miren. No va a ser bonito."
No hay comentarios:
Publicar un comentario